Es interesante ver como algunas regulaciones, sentencias judiciales, estudios y recomendaciones al hablar de Internet o de Tecnología en serio parecen quedar tan descolocados que no pueden, siquiera, hacer una mínima extrapolacion para ver las ridiculeces que dicen. De hecho sería divertido leerlos si no fuese porque los que hacen estas cosas tienen el poder de influir sobre nuestras leyes o la opinión pública.
Uno de los primeros casos que me vienen a la memoria es el del juez estadounidense que dijo que “el adware no se puede impedir y hay que tomarlo como una de las cargas de usar Internet“; luego apareció un juez español que determinó que “comprar en Internet con una tarjeta ajena no es una estafa” y finalmente, Amnistia España dice que “en los videojuegos se vulneran los derechos humanos“.
Es interesante, de acuerdo a estas “autoridades” o “expertos” en Internet no hay castigo para; instalar programas sin autorización de los usuarios en sus PCs… dando con esto una base para que se puedan llenar las PC’s de programas de terceros; tampoco es un delito usar una tarjeta ajena… por lo que si no es delito, el banco tiene derecho a obligarte a pagar so pena de, si te negás, a estropear tu historial crediticio… y finalmente lo de Amnistía.. que mejor que usar las palabras de nacho escolar “Les contaré un secreto: en los videojuegos no se pueden vulnerar los derechos humanos porque -no se lo van a creer- los monigotes que salen en la play no son personas de verdad”.
Este tipo de regulaciones/tendencias solo sirven para:
– frenar el desarrollo de internet;
– perder la confianza de los usuarios hispanoparlantes, de por sí mucho menos propensos a poner la tarjeta en un sitio de comercio electrónico
– y finalmente para atacar la paranoia de los videojuegos “agresivos”.
Lo que mas me sorprende es la diferencia con una empresa de comercio electronico como e*trade que por motu propio decide reembolsar a las víctimas del fraude online como una forma de reforzar la confianza y ampliar su mercado.
8 respuestas en “El problema de no saber”
“internet es un invento del demonio”
(fidel castro)
“un cosa para ver pornografia y organizar suicidios colectivos, demas de timar a la gente que da sus numeros de tarjeta de credito”
pensamiento popular
y luego en un medio sale que “la ebriedad no es causal de despido” y en otro articulo que: “te pueden despedir por fumar”. Coya e loco, no?
Nunca tan de acuerdo con lo que leí. La única que queda es esperar hasta que nuestra generación (que no es taaaan ignorante) llegue a esos lugares, aunque seguramente también seremos unos viejos ignorantes ante los avances del momento.
Supongo que eso de vejez y sabiduría no se aplica en cuanto a tecnología.
Bueno, ni siquiera muchos medios de comunicación entienden el tema o lo informan como deben, por ejemplo el caso de la red de pornografía infantil por el que hicieron un allanamiento en una oficina del círculo médico de Córdoba, en el que para empezar hablaron cosas sin conocimiento, como referirse a P2P (nombrándolo pedospé) como una red internacional de intercambio de pornografía, sumado a la poca intención de muchos medios a explicar bien como fue el tema, sin preocuparles demasiado hablar mal de una institución que no tuvo nada que ver con el tema, ya que aparentemente fue un empleado administrativo que desde su PC cometió el delito, si es que lo que hizo es un delito en Argentina (y más allá de que se trate de lo aberrante, brutal, desagradable, etc que es el porno infantil).
Ignorantes existieron, existen y existirán siempre.
Ya a esta altura me limito a ignorar ese tipo de comentarios, de la misma índole de quienes en su momento defenestraban a la televisión cuando esta recién aparecía.
Es que esa es la forma en que manejamos todos los asuntos de tecnología en Latinoamérica. En los diarios ponen a ciertos “periodistas” a ventear sin reparo alguno su soberana ignorancia respecto a Internet y sus derivados… ah, pero como es Fulanito de Tal y escribe la columna X en el muy respetado diario Y, entonces debe ser cierto (silogismo del razonamiento popular).
Y por otro lado, acaban de nombrar en mi país un gerente de telecomunicaciones cuyo conocimiento de ese tema evidentemente se resume en… usar y contestar un teléfono. Y después nos preguntamos por qué seguimos siendo países subdesarrollados.
Había un viejo que la tenía clara y se llamaba Peter Drucker. Está bien, no es representativo del promedio, pero recuerden que llegó y se fue antes que nosotros y habló de todo esto con una lucidez terrible.
Lo de “en los videojuegos se vulneran los derechos humanos” me recuerda a un diálogo que era más o menos así:
Neo:”¿qué pasa si muero en matrix?”
Morfeo:”el cuerpo no puede vivir sin la mente.”
Más que el tema de “no saber” lo peligroso es “creer que uno puede meterse sin saber”.
La ignorancia puede tolerarse y corregirse cuando viene acompañada de humildad. El que sabe que no sabe, y entiende que no sabe, pregunta primero y actua después.
Cuando la ignorancia viene aliada a la prepotencia, estamos en serios problemas.
En el caso de España la cosa está cada vez más jodida. Temas como el de la SGAE no solo demuestran que los juristas españoles de tecnología y (por decir algo) “ciberderechos” no tienen ni idea ni estima. Lo peor es que dejan antecedentes que en un futuro pueden tomarse como jurisprudencia. O sea que hay que estar vigilantes de que en cualquier otro país no se les ocurra tomar las leyes españolas como ejemplo.