Si hay un negocio perverso en el mundo académico es la publicación de papers académicos un tema que ya tocamos en este blog en 2003 de la mano de Juan Pablo Pinasco un matemático que sabe como es el negocio editorial y como Internet iba a cambiar las reglas de juego.
Para entender este negocio: Un académico mide gran parte de su "valor" en papera publicados, esos son revisados por pares que lo hacen ad-honorem para poder formar parte de ese ecosistema, esos académicos cobran menos de 1USD por nota por el valor académico que buscan y su sueldo lo paga una universidad que ve como el copyright de esas investigaciones pasa a manos de una editorial que no puso un peso de su bolsillo y que encima fueron creadas con subsidios del gobierno
Finalmente Princeton acaba de enfrentarse a estas editoriales gigantescas y decidió imponer una política que le da a la universidad "derechos no exclusivos para poner al alcance de todos las investigaciones académicas escritas por su claustro académico a menos que un profesor pida específicamente lo contrario" esto implica la libertad para poner dentro de su sitio y el permiso claro y directo a los profesores de exponer sus escritos en sus páginas al alcance de todos los investigadores del mundo sin tener que pagar suscripciones anuales de miles de dólares.
Esta noticia es, de las que leo hoy, la más importante a nivel estratégico... ponerse del lado de los profesores (no me importa si lo hacen por convicción o porque no era negocio darle tanto poder a las editoriales) y permitir que todo ese conocimiento esté al alcance del público y pueda reproducirse o ayudar a generar trabajos derivados (que es la base de la investigación académica!) es algo que hay que valorar.
Links: PDF con la nueva política y link al post del blog de Princeton, via: The Conversation