Siempre digo que la única suscripción que mantengo sin importar si me mudo o cambio de trabajo es la The Economist, el otro dia leía una nota sobre el suceso de esta revista en La Nacion y hubo algunas frases que me llamaron la atencion por lo totalmente diferentes al enfoque objetivo que hacen de los nuevos medios.
Sobre todo cuando en una era de “nuevos medios” donde lo importante es dar espacio al “periodismo ciudadano” y donde lo “personal” suma valor y credibilidad (no siempre bien ganada) frente a lo “institucional” de un medio tradicional.
El anonimato de sus periodistas -todos los artículos salvo sus informes especiales (surveys) de 14 páginas van sin firma- sugiere a quienes lo miran de afuera un grupo coherente que coincide en todo. Falso. El editor de los sesenta apoyaba la guerra en Vietnam; su hombre en París era un trotskista. Los puntos de vista respecto de Medio Oriente, por caso, son igualmente divergentes hoy.
Muchos de sus periodistas están a la izquierda del periódico, como lo estaba yo. Pero en 36 años no recuerdo una ocasión en la que las divisiones políticas llevaran a enfrentamientos personales. Tampoco hay muchas puñaladas por la espalda. El anonimato ayuda mucho en ese sentido. Los que escriben en The Economist lamentan no poder firmar. Pero es más difícil que se resienta el ego o sentir furia porque el editor de una sección masacra prosa cuidadosamente cincelada, cuando se sabe que el artículo es de The Economist y no de uno. Son pocos los lectores que sabrán de quién es el ego o la prosa que le da sustento. El resultado es un periódico más coherente, porque la diversidad rara vez llega a imprimirse.
Esta frase es de un ex miembro del Staff y me sorprende, porque este es el tipo de pensamiento que va totalmente en contra de lo que se expresa en los “nuevos medios”.
Digo… la confianza, la credibilidad de uno en ese caso esta dada por el nombre The Economist y NO por el apellido que firma la nota; son pequeños detalles que a veces uno pasa por alto, pero evidentemente cuando uno debe dejar de lado su nombre para ganar reconocimiento y credibilidad es que ESE medio está haciendo las cosas bien (y OJO que no digo que sea politicamente correcto, o nada, solo digo que como medio las hace bien porque uno puede disentir o no, pero el verdadero periodismo debe ser reconocido siempre.)
Ahora, todo esto me viene a la mente porque el nuevo Survey esos informes de varias páginas y que SI tiene firma de este número es sobre los nuevos medios y la audiencia participativa. Among The Media (en ingles) tiene una visión que, pese a venir de un medio TAN tradicionalista como ese no deja de sorprenderme por la calidad.
Realmente muy recomendado.
3 respuestas en “The Economist y los nuevos "medios entre la audiencia"”
Justo hoy leo que algo se está cociendo en eCuaderno!!
po no sé, pero me da a mí que puede que resulten muy “diversos” ellos en la redacción, pero lo que se lee, suele ir en un sentido claro: apoyo uniforme a la invasión de Irak, aunque después se critique como han continuado con la ocupación…
Coincido con vos. En el Economist aparecen a veces articulos contrarios, lo cual lo hace más pluralista a pesar de estar encuadernado todo con el rectangulito rojo en la tapa.
Sin embargo dentro de esa diversidad hay una línea. No es solo la marca. Será …….. la coherencia, o el pensamiento lógico ?
Es excelente el audio interview que le hacen a David Sifry de Technorati sobre el cambio que estan introduciendo los blogs – podes hacer una referencia a este feed?
Pero reconozcamos que ese cambio viene de la mano de Google. Qué seria de los blogs si Google no los pusiera en la vidriera?
BTW, tengo el rectangulito rojo siempre en mi mesa de luz.