Gowex y el estúpido club de la buena onda

Hace unos días se descubrió que @Gowex era una estafa, no sólo eso sino que Gowex se enojó, dijo que iba a responder a las infamias y etc solo para hacer tiempo y anunciar que los ingresos eran mentira, que la culpa era del CEO, que automáticamente renunciaba un domingo asi podían levantar los últimos centavos que podían del mercado y esperar que la tormenta comunicacional pase un fin de semana.

El tema Gowex me importa poco y nada, de hecho si uno invierte en una empresa sin conocer sus fundamentales está apostando, si un organismo de control no analiza las cuentas de una empresa es complice de la estafa, si el equipo directivo dice que no lo sabía es estúpido o complice… repito, Gowex en si misma me importa poco y nada.

Solo me gustaría que el El estúpido Cartel Internacional de la Buena Onda en el que se convirtió el mundo emprendedor donde todos se palmean las espaldas y dicen “muy bueno!!” o “que maravilloso lo que estás haciendo” sea un poco más realista y se de cuenta que las críticas sirven, que cuestionar los modelos de negocio no es de mala onda sino de persona coherente y que decir “oigan, este es un estafador” no debería condenarte al ostracismo por “cenizo”

Con que el ecosistema emprendedor aprenda esto, Gowex va a servir de algo… si en cambio ahora solo piden por la cabeza del CEO y dicen “yo ya lo veía venir” o reflexiones profundas como “lo que toca Ana Botella lo hunde” no se aprendió nada y punto.