Con menos de una semana de diferencia Google y Facebook pusieron sus armas sobre la mesa y atacaron el tema de la privacidad de formas diferentes pero armando su jardín vallado y protegiendo sus ventajas competitivas frente al resto del ecosistema de publicidad online.
Mientras Facebook se puso defensivo pidiendo una regulación que le complique la vida a competidores pequeños, Google decidió mostrar que hay opciones para “cuidar la privacidad” y entonces presento varias cosas con pequeño impacto en su negocio y una que es una bomba para el resto: Chrome va a incluir tecnología que fuerce a los devs a pedir un opt-in explícito para usar en sitios de terceros aka: anti-fingerprint pero…