En Daring Fireball destrozan una nota del New Yorker: Does a Company Like Apple Need a Genius Like Steve Jobs? por algo tan básico como no entender que el éxito de un negocio no se mide en cuan abierta es una empresa o no.
El debate sobre si Apple es "open" o no es tan antigüo como ridículo a nivel comercial, le fue mal en los ´90 y le va excelente hace una década y su ¿corazón? no cambia; recuerdo el post de 2008 Como lograrlo haciendo todo al revés y los intentos de Apple de cambiar el tono semántico de la discusion de "cerrado contra abierto" a "fragmentado contra integrado" para que a nivel PR o comunicaciones no tenga connotación negativa.
La realidad es, el corazón del negocio no funciona en base a su "filosofía" lo unico que cambia son las métricas de éxito en base a esta filosofía y eso ni siquiera implica mejores resultados trimestrales.