Hace ya un largo tiempo vengo pensando en las empresas gigantes que no cambian sus paradigmas o partes clave de sus negocios; hace ya casi un mes que estoy usando un teléfono con Windows Phone 7 y se me ocurrió que es un ejemplo genial de como una empresa gigantesca puede poner un pie en el freno, evaluar el mercado, reescribir desde cero un sistema operativo y lanzar algo que innova hasta en concepto de interfaz de uso.
Haciendo un poco de historia, Windows Mobile 6.5 fue el predecesor de este OS y fue lanzado en mayo de 2009; con lo que el lanzamiento de Windows Phone 7 casi dos años después muestra el tiempo que se tomaron para poder poner en el mercado un sistema operativo mucho más cercano a los post-internet que a los pre-internet que existen en el mercado de smartphones.
“Un elefante corre rápido pero no puede girar en 45 grados”
Esta frase la dijo un ejecutivo de una multinacional (no es MSFT) que conocí hace poco pero resume bastante bien lo que hizo MSFT con este desarrollo; entendieron que las ediciones anteriores de Windows Mobile eran simplemente NO competitivas con lo que se venía…